Durante las últimas horas las personas que nos dedicamos a esto de los incendios forestales hemos estado en mayor o menor medida pendientes de las noticias que nos llegan desde Chile. Quien más y quien menos conoce a profesionales de allá con quienes ha compartido experiencias, o simplemente es sensible a este tipo de noticias.
Cuando un fuego forestal impacta contra una zona poblada se produce una situación de riesgo muy diferente a la que se viviría en el monte, sin población amenazada, viviendas o infraestructuras que pueden verse dañadas y empeorar la situación (depósitos de gas, transformadores eléctricos, gasolineras...).
Son los denominados (y temidos) incendios de Interfase Urbana - Forestal. En el caso de Valparaíso las cifras oficiales a estas horas del Domingo de ramos hablan de 16 muertos, más de 1000 casas destruidas total o parcialmente, 700 hectáreas pasto de las llamas, y alguna reactivación del frente de llama que sigue amenazando con incrementar los daños. Lo complicado de la zona (en la que se entremezclan zonas pobladas y vegetación) unido a una meteorología desfavorable con una Humedad Relativa inferior al 15% en muchos momentos del día, fuertes vientos y altas temperaturas dibujan el escenario para que se produzcan de nuevo este tipo de catástrofes.
Zona afectada por el incendio forestal de Valparaíso. (Abril de 2014)
El problema es que no es nada nuevo. Por desgracia es algo que se advierte por parte de los profesionales de los incendios pero que en general no es percibido como un riesgo real por parte de las autoridades ni de la propia ciudadanía. Hasta que ocurre.
Al efecto del fuego se unen la atención a familiares de víctimas mortales, los heridos, los ataques de ansiedad, los cortes de luz, los accidentes de tráfico... un escenario dantesco que se repite cada vez que un fuego forestal impacta contra una zona poblada. De hecho, esto mismo ya había ocurrido. Hace poco más de un año. 150 casas ardieron en Valparaíso.
Noticia de incendio catastrófico en Valparaíso con afección a 150 viviendas. (Febrero de 2013)
En este caso es Valparaíso, pero es aplicable a otras muchas zonas del mundo. La presencia de población en zonas con riesgo de incendio forestal supone un reto cuando se desata la emergencia para los profesionales. De hecho, en muchas ocasiones las estructuras de los Servicios de Emergencia pueden llegar a verse desbordadas en este tipo de catástrofes como puede ocurrir con un gran seísmo o en inundaciones.
Pero a diferencia de otras catástrofes los incendios forestales pueden prevenirse. Especialmente pueden prevenirse los daños a edificaciones. Pero para ello es necesario ser conscientes de que existe un problema. Y de que ese problema puede acabar con un alto grado de destrucción.
Es necesario pues abordar el problema desde la raíz. La prevención basada en cuatro pilares como los que se muestran a continuación:
1. Planificación preventiva y planificación de la emergencia. Trabajar antes del incendio. Elaborar los planes necesarios para evitar que se produzca el fuego y dotarlos de recursos (por desgracia muchas veces se planifica y no se dota).
2. Gestión combustibles. Generar espacios más resistentes al fuego aplicando criterios para proteger las viviendas. Selvicultura preventiva, pirojardinería... hacer más difícil que en caso de incendio pueda arder una vivienda.
espacios defendibles. Fuente: Generalitat de Catalunya.
Se puede descargar la información en siguiente enlace (català).
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3. Infraestructuras de defensa contra incendios. Dotarse de herramientas para poder atajar adecuadamente un fuego forestal antes de empezar. En este sentido es demasiado habitual ver a ciudadan@s con ramas de algarrobo y cubos de agua. Ese tema se ha abordado anteriormente en este mismo blog.
(ver más información: parte 1 http://es.scribd.com/doc/86321786/E112-89-pags56-59)
4. Formación y entrenamiento. Para conseguir resultados eficaces en zonas de Interfase Urbana Forestal se debe formar a las víctimas potenciales bajo la premisa "¿Ser parte del problema o parte de la solución?". Del mismo modo que si alguien vive en un barrio conflictivo debe aprender algunas nociones de autodefensa personal, si se vive en una zona de riesgo forestal se debe aprender autoprotección contra incendios forestales.
en Castellón. Fuente: Consorcio SIDEINFO (www.sideinfo.es) .
¿Cuántas veces más ha de ocurrir? ¿Cuántas muertes más? ¿Cuántos daños económicos y ambientales más? Las personas que han perdido sus casas pueden reconstruirla, no sin esfuerzo. La naturaleza se sobrepondrá y se regenerará, no sin esfuerzo.
Pero las personas que han perdido su vida ya no tienen remedio. Sólo cabe esperar que su desgracia sirva para concienciar a los que quedaron para que no vuelva a ocurrir, o al menos, para empezar a caminar el camino hacia situaciones menos dramáticas.
Hoy hay personas jugándose la vida para apagar el incendio. Otras personas la perdieron. Por respeto a ese sacrificio hay que hacer el esfuerzo de empezar a replantear la forma de abordar estos incendios forestales y sus consecuencias.
Si no se aborda de una vez por todas la problemática de la Interfase Urbana Forestal desde un punto de vista preventivo, por desgracia, habrá que seguir lamentando nuevamente escalofriantes situaciones como las que están viviendo los chilenos.
Para que nadie tenga que volver a perderlo todo.
#PREVENCIÓN
#AUTOPROTECCIÓN
#FORMACIÓN
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